jueves, 27 de diciembre de 2018

Sueños con difuntos - LADRONES DE SUEÑOS






Una vez más, en el programa LADRONES DE SUEÑOS, dirigido y presentado por Javier Mercado, fui invitada para hablar de los sueños con difuntos. A menudo, tenemos experiencias oníricas de este tipo, las cuales pasamos por alto creyendo que tan sólo obeden a nuestra nostalgia de esos seres queridos que ya realizaron el tránsito al otro lado.

Sin embargo, en un 10% de este tipo de experiencias, dichos sueños no lo son realmente, sino unas experiencias oníricas que realmente nos ponen en contacto con los espíritus de los difuntos por mil y un motivos, casi siempre originados voluntariamente por ellos en base a los mensajes que nos quieren transmitir. De todo esto, y de mucho más, hablé el pasado miércoles 24 de Mayo en este programa radiofónico que os indico y en el que participé durante un largo tiempo quincenalmente.

Si os interesa este tema, realmente apasionante, os invito a que escuchéis mi intervención. Seguro que no os defrauda y da respuesta a muchas dudas que os han podido surgir sobre este asunto. En el podcast tenéis el programa completo. Mi intervención es a partir del minuto 47.

¡Que disfrutéis con la audición!


   




La Rosa de los Vientos - CRÓNICAS DE ARCADIA





Queridos amigos:

Tengo el gusto de subir el último programa youtube de LAS VOCES DE VENUS, en el canal de CRÓNICAS DE ARCADIA, donde entrevistamos a Silvia Casasola, codirectora del famoso programa radiofónico LA ROSA DE LOS VIENTOS
.
La esposa de Juan Antonio Cebrián, fundador y creador de este magnífico programa, accedió amablemente a hablarnos de su larga trayectoria en el mundo de las ondas, tanto al lado de su ya difunto marido como en la actualidad. Ahora dirige conjuntamente La Rosa de los Vientos con Bruno Cardeñosa, otro gran divulgador y conocedor del mundo del misterio a nivel nacional.

Os dejo el programa para que podáis verlo. Realmente fueron apasionantes las anécdotas que nos contó de lo que ha sido su vida en este mundo del misterio.
Espero que os agrade. Un cordial saludo a todos.


 


VISITANTES DE DORMITORIO, LOS DESCONOCIDOS



El tema que hoy abordo es uno de los más controvertidos de los últimos tiempos. Hace uno cuantos años estuvo muy de moda, llegando a aparecer incluso en prensa y medios de comunicación como un fenómeno que se repetía de manera inquietante entre muchos individuos. Por eso, corrieron ríos de tinta para tratar de esclarecer qué es lo que se esconde bajo la apariencia de un Visitante de Dormitorio, morador o fantasma de alcoba, tales son las denominaciones que puede llegar a recibir.
Para la mayoría de la gente, este asunto es un simple mito heredado de los viejos miedos que experimentábamos de niños. Durante la infancia, la imaginación nos juega malas pasadas y podemos llegar a ver lo que no existe. Incluso las pesadillas nocturnas y los terrores de los niños hacen alusión a este tipo de situaciones, pudiendo extenderse dichos miedos también a la edad adulta, ya que han quedado en nuestro cerebro como fobias no superadas.
 Sin embargo, hay que aclarar que cuando dormimos, mostramos una configuración general muy distinta a la que ofrecemos en estado de vigilia. Nuestra mente y sentimientos, pero sobre todo nuestro cuerpo físico, se comportan de manera diferente en ambos periodos. Debido a ello, en estado durmiente mostramos una situación de debilidad e indefensión que permite fácilmente la manipulación a nivel psíquico. Esta circunstancia es aprovechada por una gran variedad de entidades que acuden en ocasiones para operar en él de una forma u otra.
 
Existen infinidad de inquietantes casos de apariciones de entidades, casi siempre antropomorfas, o a veces rodeadas de gran luminosidad y semitransparentes. Abundan también múltiples testimonios de personas que han sentido en su hogar un "inquilino" que parece no ser de este mundo, y que pulula por el recinto sin ser detectable por alguno de nuestros cinco sentidos. Es curioso constatar cómo el fenómeno de los “visitantes” no se presenta aislado, sino acompañado de una fenomenología paranormal que el sujeto ha podido experimentar, por lo general, ya en su infancia. Dicha fenomenología puede ir desde experiencias extracorpóreas, pasando por precoces clarividencias, hasta algún tipo de premonición, voces desconocidas.... Si antes de los 9 ó 10 años de edad hubo antecedentes de este tipo en el sujeto, con el paso del tiempo dichas apariciones se volverán más frecuentes y complejas.
 
Existen varias teorías sobre los visitantes de dormitorio.
 
 
Una de ellas habla de que son extraterrestres (llamados también GRISES), que visitan de noche a las personas más sensibles para observarlas y analizar sus sueños, respuestas biológicas y cuerpo físico.
 
Hay que tener en cuenta que cuando se produce una VISITA DE DORMITORIO, suele ir acompañada de una parálisis del sueño. Por eso se piensa que, en el caso de que sean visitas de algún GRIS, nos paralizan para obtener de nuestro cuerpo el tipo de información que desean. Además, no hay que olvidar que los extraterrestres se comunican también por el astral. De ahí que se considere que muchas experiencias de Visitantes de Dormitorio son abducciones extraterrestres. Los relatos de los abducidos respecto a estas figuras concuerdan bastante con la idea que se ha divulgado de los extraterrestres: figuras pequeñas, delgadas, de enormes ojos negros almendrados, transporte a naves espaciales, etc.
 
Otra teoría, basada en la Demonología y algo atávica en estos tiempos que corren, habla de que dichas visitas podrían ser obra de los Íncubos y Súcubos (Incubo: espíritu maléfico masculino, y Súcubo: espíritu maléfico femenino). Dichas entidades son espíritus que descienden de los NEFELINES, ángeles caídos en desgracia y que engendraron una raza perversa. Su apariencia es muy hermosa y atrayente, y suelen mostrarse como seres muy bellos. Dependiendo de las diferentes culturas, reciben distintos nombres, como Zabulón, Leviatán, Alpiel, Efelios... Estos seres sólo buscan sexo para poder absorber la energía vital del individuo al que poseen, y así hacerse más poderosos. En realidad, son vampiros energéticos que buscan robar la energía sexual del individuo mediante la copulación. Se cuelan en la mente y provocan sueños eróticos, hasta que se materializan y realizan el acto.
 
Dentro del esoterismo existe otra teoría, y es que los visitantes de dormitorio son seres queridos que nos dejaron en esta vida y que se proyectan en nuestros sueños, porque es cuando nuestra mente está más activa para poder percibir su presencia. En base a los testimonios que se han recibido, se habla de que podrían visitarnos para darnos algún mensaje. Personalmente, no los encuadro como Visitantes de Dormitorio. La aparición de espíritus difuntos es otro tipo de fenómeno muy diferente.
 
Una última teoría postula que estos moradores o visitantes son almas atormentadas que se quedaron atrapadas en este mundo y no son capaces de dar el paso al siguiente plano de existencia. Quizá podrían ser antiguos moradores de esa casa o lugar, almas de paso, o incluso haber fallecido entre esas paredes, quedando sus espíritus atrapados en el recinto. Tal vez esta última teoría sea la más terrorífica, porque explicaría el motivo de que temamos tanto sus apariciones.
 
No hay que olvidar la opinión de los científicos, quienes, al margen de todo lo anterior, vislumbran la probabilidad de una enfermedad pasajera que nos haga ver y sentir cosas que no son reales ni están en nuestro dormitorio, pero que los ojos perciben como auténticas. Esto podría deberse a enfermedades mentales o pequeños problemas puntuales del cerebro.
 
Hay una serie de aspectos a tener en cuenta en esta fenomenología:
A.- El contagio psíquico: sucede cuando el fenómeno “impregna” a otros habitantes de la casa, es decir, hay un contagio y no es sólo una persona la que ve a esa entidad o entidades, sino que pueden ser varias.
 
B.- Sensación de presencia: se produce cuando uno o varios miembros tienen la sensación de que hay presencias en la casa a las que se considera «intrusos». Es una impresión neutra, acompañada de aprehensión y temor, que se presupone sin necesidad de corroborarla sensorialmente. Es como si en algún momento se sintiera la presencia de algo que se mueve, que entra en la habitación y puede acercarse a la cama. Incluso se puede sentir presión en el colchón (en estos casos, la ciencia alude al estado hipnagógico del sueño). La mitad de las personas que han dado su testimonio relatan que se sienten observados fijamente, pero no saben identificar desde qué punto.
 
C.- Presencia amenazante: ciertas personas aluden a que esa presencia o la sensación que la acompaña es peligrosa o malévola, y que intenta la posesión. Ésta va acompañada de un fuerte sentimiento de terror, peligro y urgencia; es como si necesitasen despertarse lo antes posible
 
D.- Alucinaciones visuales: suelen variar depediendo de la experiencia, y pueden ser también vagas e indefinidas. En ese momento, el estímulo externo percibido se reconoce como real, y la presencia queda fuera de la vista, en la periferia del campo de visión, o camuflada entre las sombras del cuarto. En algunos casos se relatan imágenes detalladas de objetos y seres como fantasmas, figuras oscuras a los pies de la cama...
 
E.- Alucinaciones auditivas: son momentos en los que se tiene la convicción de que los sonidos son reales, y que provienen del exterior más que de la mente del individuo. Pueden ser sonidos elementales, mecánicos e intensos, como zumbidos, rumores, siseos, correteos, rugidos, campanadas, golpes, vibraciones, silbidos, chillidos o gimoteos. En otros casos son sonidos identificables concretos, como timbres de teléfono, sirenas, herramientas, golpes de puerta, arrastrar de muebles, vidrios o vajilla rompiéndose, música extraña, sonidos de radio con ruido blanco o que recibe varias estaciones, sonidos de viento, etc. 
 Hay que aclarar que las voces humanas son el sonido más frecuente, siendo escuchado en un 37 por ciento de los casos, tanto en forma de griterío como en leves susurros, pero siempre sin un mensaje identificable ni claro.
 
F.- Alucinaciones táctiles: son muy comunes, y relacionadas con el o los intrusos. Es como si el colchón se hundiese bajo el peso de alguien que se sienta, que le retira las sábanas o que le agarra de las manos.
 
 G.- Dificultades respiratorias: es otra sensación bastante frecuente, que produce una opresión en el pecho y dificultad para respirar, como si alguien estuviese apretando nuestro cuello, por lo que se genera una sensación de sofoco y asfixia. Estas percepciones pueden explicarse por la parálisis del sueño, la cual inmoviliza los músculos voluntarios.
 
¿Cómo salir de una situación así? La investigadora Ann Druffel remite a una buena táctica para salir de ese estado inquietante, y no es otra que tratar de hablar en voz alta, rezar, orar o encomendarnos a nuestras más firmes y sólidas creencias para que esa situación se controle y dicha entidad se disipe. Tanto ella como otros investigadores aseguran que es uno de los mejores sistemas de defensa ante un posible ataque de estas “entidades”. 
 
Bajo mi punto de vista, y puesto que he sido víctima de más de una presencia de este tipo, aconsejo no tener miedo y tratar de moverse, evitando el miedo por encima de todo. Alejar el temor de nuestra mente y tener la voluntad de encararlos hace que desaparezcan de manera inminente, pues en este plano nosotros somos más fuertes que ellos. Esta es nuestra dimensión, y al provenir ellos de otra diferente, no tienen la misma fuerza ni vibran de la misma manera.
 

domingo, 16 de diciembre de 2018

CÓMO LEERSE EL TAROT A UNO MISMO





El aprendizaje del tarot es un compromiso que tomamos de por vida. No existen rutas cómodas ni fáciles, pues si se quiere ser un profesional del Tarot, un profesor o un practicante asiduo, es necesario que las cartas despierten en nosotros una absoluta pasión. Sin ella, no lo conseguiremos.

 

Nunca dejamos de aprender

 

Conforme vamos creciendo, también lo hace nuestra comprensión del Tarot. A medida que nuestra conciencia se desarrolla, nos hacemos más conscientes de la profundidad de los simbolismos en cada uno de los arcanos. Es ahí cuando comenzamos a ver cómo dichos símbolos reflejan nuestra vida cotidiana dentro de un marco mucho más amplio, o también advertimos la naturaleza intrínseca de una tendencia, o de una influencia que toma impulso y se convierte en un importante evento ante la minucia de todo lo demás.

 

Sin embargo, y como ya habréis podido imaginar, no hay un camino realmente rápido para la iluminación. Por eso, la imaginación y la experiencia son componentes clave en el arte del Tarot.

 

Comenzando a familiarizarse con el Tarot

 

El mejor modo para comenzar a familiarizarse con los naipes es haciéndolo con uno mismo. No hay nada mejor que practicar a solas, aunque con el paso del tiempo vayamos incorporando a amigos, vecinos, familiares... De todas formas, es importante tener en cuenta que el contacto inicial se realiza con nuestro Yo más íntimo. Como es nuestro ser interior, y lo conocemos bien, es fácil determinar cómo fluyen las cartas en nuestra vida, y relacionarlas así con la experiencia inmediata.

 

De esta manera, se puede ver el resultado de las cosas, la naturaleza de las personas, así como encontrar nuestro propio espíritu. La clave de una lectura óptima es que sea sencilla, y que realicemos las cuestiones correctas. Si comenzamos a divagar y a efectuar preguntas de manera desordenada, nos pueden crear confusión o hacer que nos perdamos en la maraña de noticias que el Tarot nos lanza.

 

¿Con qué comenzar?

 

Una forma fantástica para comenzar puede ser elegir una carta para ver lo que nos depara el día. Podemos extraer una carta del mazo, y enfocar su simbolismo de una manera personal y exclusiva. Sin embargo, también es interesante leer la prensa o las noticias, ya sea a nivel local o internacional. A partir de ese punto, podemos enfocarnos en ver cómo nos afectan dichos eventos, cuáles son nuestros pensamientos al respecto, y luego ver cómo la carta nos habla en conjunto.

 

Siempre hay que saber leer entre líneas, pues el Tarot en ocasiones puede ser muy literal, aunque en otras se muestre claramente sutil. Por eso, la carta que se haya sacado podría revelar una influencia externa en nuestro día a día (os recomiendo que siempre anotéis todo aquello que vayáis descubriendo).

 

¿Qué preguntar?

 

Dependiendo de la pregunta que planteemos, la respuesta de las cartas será más concreta o más difusa. Si deseamos conocer las influencias actuales sobre algún tema, esa será la consulta que debamos hacer, y en base a la que debamos interpretar las cartas (recordemos que tienen muchos simbolismos, y que nos tenemos que centrar en la interpretación sobre aquello que deseamos saber). Si lo que necesitamos conocer es algo concreto, entonces debemos ser literales y concisos en nuestra pregunta. No hay que olvidar nunca utilizar la palabra “Yo”, si es que preguntamos por nosotros mismos. Esta es una cuestión importante.

 

¿Qué tirada hacer?

 

Cuando leo el tarot para mí misma, siempre suelo realizar una tirada de tres arcanos, o líneas sucesivas de tres en tres. Mi consejo es que procuréis estar serenos antes de comenzar realizando una respiración profunda, y acto seguido recordéis que hay que ser objetivo. Después, colocad las cartas boca arriba y echad un vistazo en general. ¿Qué es lo primero que salta a la vista? ¡Ese es el punto concreto para comenzar!

 

No olvidéis escuchar a vuestro corazón, permitiendo que el maestro interior que todos llevamos dentro os muestre las visiones que acompañan a cada carta. El Tarot anhela hablar con nosotros, y mediante este proceso le estamos dando una voz para que se exprese, creada a partir de nuestra sabiduría interior. Por eso, la imaginación es una herramienta vital en este proceso.

 

Barajar, extraer cartas y leerlas

 

Se toma todo el mazo, se baraja y se vuelve a apilar en un único montón. Después, se divide en tres pilas o grupos, y se elige uno de ellos. Realizamos la pregunta, y después tomamos las tres primeras cartas del montón elegido. Si queremos una respuesta más detallada, extraemos otras tres cartas, y veremos la sorpresa que causa comprobar que la historia prosigue y que, además, está basada en nuestras cuestiones.

 

Otra opción es tomar las cartas superior e inferior de ese montón que hemos elegido. Después, se leen, primero la de arriba, y después la de abajo, siempre enfocándolas desde un punto de vista que refleje un aspecto importante de la cuestión planteada.

 

Una tercera opción, algo más elaborada, es dividir el mazo en tres bloques, uno con los arcanos mayores bien barajados, otro con los menores, y un tercero con los de la corte. Seleccionamos al azar una carta de cada uno de estos tres montones, los ponemos juntos y los miramos en conjunto ¿qué dicen? Recordad siempre que las cartas tienen múltiples formas de entenderse, así que procurad leerlas de una perspectiva lo más amplia posible.

 

Consejo final

 

Al igual que ocurre con cualquier práctica holística, es importante ver la lectura toda en conjunto, incluyéndonos nosotros también. Una breve meditación es de gran ayuda para calmarnos, algo que resulta vital. Es un proceso que requiere su tiempo, y el inconsciente también necesita tiempo para evolucionar y generar ideas y puntos de vista. El Tarot funciona en muchos niveles a la vez, y si sabemos leerlo correctamente, nos sorprenderemos de lo mucho que nos puede ayudar. El auto descubrimiento puede sernos de gran importancia para nuestro crecimiento personal.

 

Cuando nos conocemos a nosotros mismos, descubrimos también al resto de la humanidad en nuestro interior, y al fin y al cabo ¿no es eso lo que el tarot representa, esa experiencia de la humanidad?



martes, 4 de diciembre de 2018

LA AYUDA QUE NOS BRINDA EL TAROT



En muchas ocasiones, las personas que se acercan al tarot, y especialmente aquellas más curiosas, se preguntan cuál es su utilidad práctica, para qué sirve y de qué manera les puede ayudar. A veces, hasta llegan a cuestionarse su veracidad, así como los mensajes que el cartomante transmite, pues ha sido tanta la injerencia e intrusismo en este campo, que se ha desvirtuado por completo su significado y el motivo de su existencia.

 

¿Hasta qué punto puede ayudar el tarot? Mi experiencia me indica que muchas de las personas a las que he conocido lo que necesitaban fundamentalmente era alguien con quien hablar, alguien a quien contarle sus problemas y que les escuchase. Las diferentes situaciones que he vivido me confirman que el ser humano necesita el calor de otro ser humano, confiar sus penas, charlar un buen rato y desahogarse. En ese contexto puedo afirmar que el tarot les ha servido de mera excusa para acercarse a una desconocida y contarle vivencias que saben ésta no va a revelar.

 

Sin embargo, en otros momentos que también se repiten con bastante frecuencia, observo que las personas tendemos a obcecarnos con los problemas que acucian nuestra vida. Probablemente tengamos delante la respuesta, clara y diáfana, pero nuestro bloqueo mental impide a menudo que la descubramos porque nuestro yo interior se niega a aceptarla. ¡Resulta tan doloroso a veces! De todas formas, y aunque así sea, no hay que olvidar que esto nos sirve para crecer. La vida es crecimiento, y estancarnos sólo implica un letargo nefasto para nuestra evolución.

 

En estos momentos tan duros en que nuestra mente y entendimiento se nublan, las enseñanzas y consejos del tarot son vitales. Sus claros mensajes nos indican, de forma lapidaria, cuál es la mejor forma de actuar así como los siguientes pasos que debemos dar.  Ese es un momento crucial, sobre todo para el tarotista, porque resulta algo complicado hacerle ver a una persona bloqueada mentalmente que su negación a aceptar la situación, el que su pareja la haya dejado, por ejemplo, puede no deberse a que uno de los dos haya obrado mal, sino a que esa persona en realidad no la quería, y que lo más beneficioso es que se aleje de ella. También resultan especialmente difíciles situaciones como las del fallecimiento o pérdida de seres queridos; en esos momentos es preciso utilizar los conocimientos con gran psicología y, especialmente, mucha humanidad.

 

En según qué circunstancias, la vida nos presenta su cara más trágica y dolorosa, y entonces pensamos que nuestros problemas son los únicos, y que nadie sufre como nosotros. En esos instantes, la persona se vuelca en el tarotista tratando de que sea éste quien le resuelva el problema, pero en realidad para lo que verdaderamente nos necesitan es para recoger, de la forma más fidedigna posible, las enseñanzas y consejos que las cartas nos ofrecen, y brindárselas en su ayuda. Todo aquel que desee saber para qué sirve el tarot, debe asumir que éste no va a solucionarle la vida. Su finalidad es marcar tendencias y mostrar vías de salida, pero únicamente somos nosotros los que podemos tomar las riendas de nuestra vida y enmendarla.